sábado, 11 de enero de 2014

{ victor paz otero }

Estoy cansado de esta luna verde, de las
insistencias lejanas del otoño.
De este vagar por calles pascalianas
que ignoro y que me ignoran.
De este estar quieto y estar acorralado.
De este ir y volver, de esta ninguna parte.
A veces no soporto ni el peso de mi sombra y,
con mucha más razón, no soporto el peso
de los huesos. Me duele el alma, suponiendo
que tenga una maldita alma. Quiero salir corriendo,
pero llueve endemoniadamente. Se mojarán
los zapatos. Me resfrío, me da gripe, habrá que
llamar al médico, ir a la farmacia por remedios.
Se agrava uno. Se muere.
¿Y quién va a venir con esta endemoniada lluvia
a mi velorio?

No hay comentarios: