Perdimos la perspectiva, perdimos la conciencia, nos perdimos, a nosotros mismos.
Pero aún tenemos tiempo de recuperar, la vida nos ofrece otra oportunidad.
Cambiemos lo que perdimos por lo que ganamos, aún nos queda a cada uno más cosas bellas que vivir.
Mi amor, se feliz,
Te escribo tanto porque no me despedí.
Me quedo con tu amor y tu ternura, me cuidaste a tu manera.
Siempre estaré muy cerca, quisimos atarnos a la fuerza.
Tu sangre recorrió, cada una de mis venas.
Desde entonces la vida merece mucho más la pena.
(...)
No volveré a sentir igual, lo que tuvimos fue de una intensidad que pocos pueden comprender,
Y aunque ya no dormirás junto a mi, te doy las gracias mi vida,
Porque, en mi vida,
Siempre tendré parte de ti.
"...te llevaré en el alma como una necesidad insaciable, y serás inmortal en mi memoria y en mi piel."
1 comentario:
Bello. "Te escribo tanto porque no me despedí" en esta frase vive la magia.
Un abrazo.
Nos seguimos leyendo.
Publicar un comentario