viernes, 26 de julio de 2013

{ arroz sin tirar }

Parecía el juicio final, o por lo menos así se sentía en el aire. Aire tenso, cortante, o por lo menos así lo respiraba yo. Todos estaban allí. No sentados en bancos de madera antigua, sino de pie, rodeándome expectantes. Tampoco parecía existir religión alguna que encaminara el evento, ni sitio cerrado. Se asemejaba a un callejón, muros llenos de carteles arrancados de conciertos pasados, noche cerrada y focos de luz en alguna parte. Nadie me resultaba familiar, aún así no eran desconocidos. Me miraban y sonreían amables aunque la pena se podía notar en sus ojos ¿sería el reflejo de los míos? Recuerdo que yo caminaba y ellos conmigo. Llevaba un vestido del cual no consigo rehacer más allá del color típico, de resto muy años 20, nada de exuberante belleza. Avanzaba erguida , firme y, a su vez, con cada paso, los nervios invadían mis piernas y la indecisión mi mente ¿acaso no es esto lo que yo quería? No pude acabar mi camino, no supe dar la respuesta afirmativa que se esperaba por mi parte, simplemente me paré en seco y retrocedí muerta de miedo, supongo que no pensé en llegar tan lejos cuando decidí continuar pasará lo que pasará. Tú te quedaste ahí. Expresión triste. Pude ver la decepción en tu mirada, aunque me dio la sensación de que lo estabas esperando, de que ya lo sabías, y se me rompió el corazón. Simplemente no pude ¿dónde nos deja esto? ¿dónde nos lleva esto?

No hay comentarios: