lunes, 7 de abril de 2014

{ 25 días }

Sólo han pasado 25 días desde aquella noche. 
Sólo uno hizo falta para conectar. 
Sólo dos para activar todas las alertas. 
Sólo tres y ya eramos algo.

Desde entonces ya ha pasado una vida. Los recuerdos inventados y vividos se solapan sustituyendo sueños por realidad. Todo encaja deslizándose como la seda, de un modo tan perfecto que ni se vislumbra la unión. Tú haces donde yo esperaba que hicieras y viceversa, casi pisándonos las palabras, los gestos, el alma.

También hay momentos en los que no espero nada y aún así llegas.
Como cuando ríes a carcajadas,
casi sin parar a respirar,
 y sin saber por qué,
soy feliz.

Y es entonces,-mientras te miro- cuando me pregunto dónde guardas tus defectos o si encontraré alguno.
Y a cada segundo pienso si te quedarás por siempre,
por que si algo quiero ahora,
es que no te vayas.

No hay comentarios: