viernes, 10 de enero de 2014

{ simone de beavoir }

Besé sus ojos, sus labios, 
mi boca bajó a lo largo de su 
pecho y rozó el ombligo infantil, 
el bello animal, el sexo, 
donde su corazón latía a golpecitos; 

su olor, su calor me emborrachaban
y sentí que mi vida me abandonaba,
mi vieja vida con sus preocupaciones,
sus fatigas, sus recuerdos gastados.

No hay comentarios: